Estar enfermo cansa…
Estar enfermo es una fuente inagotable de degoteo de momentos de dolor: cabeza, brazos, piernas, tronco…
Estar enfermo, de forma constante cansa, agota, desgasta, debilita, irrita… Aprender a estar enfermo es una tarea árdua… Por ello cuidar el cuerpo es fundamental.
Las personas deberían saber decir qué sienten. En ocasiones expresamos dolor en zonas concretas y físicas del cuerpo, pero seguimos avanzando en nuestro día a día, porque así se espera de nosotros, a pesar del dolor. El dolor cuenta con una gran desventaja: en multitud de ocasiones no es visible.
Encadenamos nuestro dolor a nosotros mismos sin saber cómo expresarlo correctamente, muchas veces dejando de hacer actividades, otras muchas poniendo mala cara, excusándonos o mitigándolo con fármacos.
En otras ocasiones ya levantamos la mano cuando es demasiado tarde, cuando ha pasado nuestro dolor el punto de incomprensión para los demás. Y en este punto hemos llegado al agotamiento, físico y mental. Porque tener dolor cansa, física y emocionalmente.
Los centros de dolor, los profesionales dedicamos a ello, os podrán ayudar a llevar y sobrellevar el dolor. Nuestro sistema nervioso, nuestros umbrales de dolor, son los grandes partícipes de estas situaciones.
Pero no hay que olvidar que el dolor agota. Cuántas veces no habré oído en mi consulta el «ya no puedo más»… Cansados de sentir dolor, los pacientes sólo piden una tregua en su día a día, pero hay enfermedades que no dan treguas. El dolor pasa entonces a ser algo sempiterno, mitigado en momentos puntuales, pero que nunca desaparece.
Y los profesionales y los familiares de afectados por enfermedades que causan dolor debemos tenerlo en cuenta y actuar acorde con estas situaciones, las cuales nos pasan desapercibidas, en ocasiones, y causan la mayoría de enfados, confrontaciones y peleas familiares. El dolor no se vé, pero está ahí, debemos respetarlo como tal (aunque implique un acto de fe por nuestra parte).
Hay grandes profesionales actualmente que se dedican al dolor, acudid a ellos, preguntad por ellos. Os pueden ayudar.
¿Seguimos?